Este es un espacio que propone reflexiones y debates sobre la inter-retro-conexión sociedad en la Naturaleza y la Naturaleza en la sociedad.

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jueves, 28 de julio de 2011

LA EDUCACIÓN EN EL SISTEMA MUNDO MODERNO

La Educación en el Sistema Mundo Moderno: La lucha entre ciencias sociales, Estado y Mercado [1]
Por
Hernando Uribe Castro
Magíster en Sociología

Cada país posee particularidades que caracterizarán el campo de la Educación, como por ejemplo, sus instituciones, políticas y comunidad académica. Esto se puede evidenciar en los indicadores de producción intelectual, de planes y programas en pre y posgrados, en la fortaleza de los grupos y centros de investigación y de pensamiento y en muchos otros aspectos. Diferencias que para el sentido común, están sustentadas por las fronteras territoriales, diferencias étnicas, históricas y socio-culturales.

Pero lo que no se puede perder de vista es que si bien existen estas particularidades y diferencias entre países, las características de este modelo de Educación obedecen a las lógicas impuestas por la economía-mundo capitalista que jalona el Sistema Mundo Moderno. Los problemas de la Educación no son de un país, sino problemas resultantes del modelo educativo en un contexto donde prima el Mercado.

Sobre este asunto destacados pensadores de las ciencias sociales como Immanuel Wallerstein, Atilio Borón, Boaventura de Sousa Santos, Manuel Castells, Alain Touraine y Pierre Bourdieu, se han interesado en develar las implicaciones profundas que tiene el sistema sobre el campo de la educación en todos sus niveles.

Para la ciencias sociales lo que se presenta con este modelo educativo es una crisis total que privilegia la formación para el desempeño de oficios en espacios laborales y no la formación del sujeto; para el Estado lo que se pretende con la educación es lograr su modernización y ponerla acorde con las exigencias de la sociedad moderna; y para el Mercado lo que se presenta es una oportunidad de hacer con la educación un importante nicho para la reproducción de los excedentes de capital, no sólo porque en el contexto actual se le considera como un espacio central en el proceso de formación de futuros ciudadanos clientes, sino también porque constituye un foco de aglomeración de inmensas masas de consumidores. Pero sobre todo, porque allí es donde reposa gran parte del pasado, presente y futuro científico y productor de conocimiento, principal fuente de poder para la sociedad que se está construyendo.

La universidad se incorporó en esta lógica y por ello, tanto su esquema de funcionamiento por departamentos como unidades académicas -resultado de la racionalidad administrativa y no del juicioso reflexivo de los académicos-, como su formato de formación de sus estudiantes, están pensadas para la formación de mano de obra en el marco del sistema, pues ha sido evidente que todos los programas de estudio, en ingenierías, en ciencias administrativas y en ciencias naturales, como también en humanidades y en ciencias sociales se ubican y encuadran perfectamente en uno de los tres sectores o renglones de la economía. El discurso que sustenta este tipo de modelo es que se educa para el progreso y el desarrollo de la nación.
Por supuesto que entender esto es complejo en la medida en que nuestros propios cuadros mentales han sido construidos por este modelo de educación y, por ello, de alguna manera, lo que hemos venido realizando en las universidades, y en general en todo el sistema educativo, es formar y formarnos como fuerza laboral en el marco del sistema. Y de este marco la universidad ha sido presa.

La propuesta del conjunto de estos autores y científicos sociales, algunos más optimistas y otros no tanto, es construir e iniciar un proceso de emancipación y democratización educativa, tal como lo propone Boaventura de Sousa Santos donde las humanidades y las ciencias sociales pueden jugar un rol sustancial. Algo así como la posibilidad de neutralizar los impactos perversos del sistema capitalista que mercantiliza la educación.

Es importante entonces, romper, develar y neutralizar las ideologías, planes y programas, a veces perversos, que los poderes del Mercado construyen para la educación de estas generaciones en todos los países, muchas veces aliadas a los gobiernos de turno que administran los Estados.

El proyecto de reforma a la educación que propone el gobierno de Juan Manuel Santos, en el que se busca dar vía libre a la creación de universidades con ánimo de lucro, va en esa línea de replicar un modelo educativo que sólo es visto como una pieza más del engranaje del sistema capitalista.
28 de Julio de 2011.


[1] Sobre este asunto, con los colegas Germán Ayala Osorio y Carmen Jimena Holguín, construimos un documento que se encuentra actualmente en su proceso de publicación.

lunes, 18 de julio de 2011

SOBRE AMOR LíQUIDO Y SISTEMA MUNDO MODERNO

Sobre Amor Líquido y Sistema Mundo Moderno

Por

Hernando Uribe Castro

Magíster en Sociología

Zygmunt Bauman ha dado en denominar el amor del presente como amor líquido, es decir, toda experiencia amorosa entre individuos que no es estable, que se encuentra llena de incertidumbres, peligros y riesgos. Lo duradero y estable se transforma hacia lo inestable y lo fugaz. El amor es como el agua que trata de contenerse entre las manos, pero su liquidez le permite filtrar por los dedos y escurrir. Así, muchas veces el amor líquido es un amor de sufrimiento y de permanente búsqueda del amor ideal, donde las vínculos entre los seres humanos son frágiles.

Esta característica del amor del presente, obedece de alguna forma a las implicaciones de los estilos de vida impuestos por el Sistema Mundo Moderno, que privilegia la economía-mundo capitalista, la cual ha hecho del amor, materia prima de producción. Algo así como un productor y producto que puede producir importantes excedentes de capital. El “amor” como el oro del presente, un amor producido.

Las trampas del Mercado a través de la producción de música, cine, literatura y todo tipo de expresión de la cultura material, ha colaborado a la transformación de las relaciones del pasado por unas del presente más fluidas y del vértigo. En el mundo del entretenimiento, principal característica de la televisión y donde reposa, en buena parte, el poder de manipulación de los medios, el mensaje es tener parejas por periodos cortos, sacar provecho de ello, separarse y unirse rápidamente con otro(a). Actores y actrices de cine, cantantes famosos(as), modelos, personajes del mundo político y del deporte, todo este tipo de oficios producidos por la economía-mundo capitalista, vienen construyendo relaciones fluidas, a corto plazo y con la movilización de importantes valores de dinero entre uniones y separaciones y que son prototipo para muchas personas del cómo se debe vivir actualmente. El amor que le dicen tenerle a una persona un día, cambia al otro día hacia otra persona, y así, sucesivamente. Situación que por su puesto es aprovechado por las industrias mediáticas para ganar cuotas de mercado, que en última se convierten en las mayores fuentes económicas de esta industria.

Frente a estas situaciones el público no crítico no logra captar que más que decisiones personales de estos personajes del mundo del entretenimiento, se evidencia las fuerzas del Mercado que publicitan estos hechos y sacan un provecho sorprendente que puede estar representado en más ventas, más cotización del nombre como marca, seguimiento y vitrina en todo tipo de revistas y medio noticiosos, hasta el pago de valores increíbles de dinero por fotografías, imágenes o alguna evidencia material.

La foto del beso de Shakira con el famoso futbolista Piqué que costó una cantidad importante de dinero mostraba la muerte de su relación con el argentino pero el inicio de una nueva relación con el español. Un ejemplo claro de amor líquido, mediado por los intereses comerciales y del Mercado en el marco de la economía-mundo capitalista y un festín para el plato televisivo que espectaculariza la banalidad.

Las generaciones adultas, un poco más relacionados con el amor de siempre, estable y eterno, no logran comprender lo que está sucediendo y las generaciones más jóvenes lo toman como lo más “normal” de la sociedad; estas nuevas generaciones al llegar a su vida adulta pueden haber sostenido tantas relaciones a lo largo de su vida, como relaciones de amigos.

El sentido y significado del amor que se produce y es producido por el marco de la economía-mundo capitalista del presente rompe con todos los amores del pasado. Y en este marco proliferan canciones líquidas, cuyos impactos son masivos gustan mucho, entre los jóvenes. “Yo no se mañana” de Luis Enrique y “Gitana” de Shakira, entre otra cantidad producidas desde el Reggaeton y que hacen parte del escucha diario de los más jóvenes; todas ellas fueron y han sido masivamente aceptadas por el público, e incluso, algunas de ellas ganadoras de Premios como el Grammy.

En general, un mundo donde emergen amores inestables, fugaces e interesados. El amor eterno, aquel amor que podía transcender, incluso hasta la muerte, como lo expresaba la espléndida voz de Rocío Dúrcal, ha entrado en su propia incertidumbre y corre el riesgo de desaparecer…

Adaptarse a esta nueva lógica en el estilo de vida, para muchos de nosotros será caótico y producirá sufrimiento, pero para otros será lo más común del mundo.

Para el amor líquido, corazones livianos…

huribe@uao.edu.co

Julio 18 de 2010

viernes, 15 de julio de 2011

ENTERRAR A LOS MUERTOS, DE ACTO SOLEMNE A NEGOCIO REDONDO

Enterrar a los muertos, de acto solemne a negocio redondo

Por

Hernando Uribe Castro

Magíster en Sociología.

Cada grupo social tiene sus propias formas de tratar a los muertos tal como lo aprendieron de sus generaciones pasadas. Según testimonios de personas que vivieron hacia mediados del siglo XX en Cali, ciudad Colombiana, el acto de enterrar a los muertos se consideraba un hecho trascendental para la familia afectada y la comunidad circundante. Era un momento en el que el grupo familiar se encontraba en la casa del difunto y entraban en acto solemne, de respeto y con expresiones y cantos de alabanza con las que se pensaba, el grupo intercedía por el muerto ante Dios para éste le abriera las puertas del cielo y le limpiara de todos sus pecados terrenales.

Este acontecimiento, al que se le denominaba velación, implicaba tener el cuerpo sobre una mesa, y en cada esquina una vela encendida. Debajo de la mesa un vaso con agua, porque el alma del muerto venía a tomar el agua. Los asistentes al velorio llegaban, como parte del acto solemne, vestidos de negro o blanco. Luego de velar la persona por uno o más días, se enterraba en el Cementerio Central y después vendría el novenario que consistía en rendirle homenaje al muerto durante 9 noches seguidas en las que participaba toda la familia y los vecinos. En estos novenarios se cantaba, rezaba y oraba por el muerto con expresiones como “Dale el señor el descanso eterno y brille para él la luz perpetua”. Todo esto acontecía en la casa del muerto.

Velorio de Roberto Castro, Cali, 1954.

Fuente: Archivo Familiar Hernando Uribe Castro, 2011.

Luego en la ciudad, se construyen otros cementerios localizados en diferentes puntos cardinales como el Metropolitano del Norte, el Metropolitano del Sur, el de Siloé, Jardines de la Aurora y Jardines del Recuerdo sobre el occidente. Según el imaginario colectivo, había una relación entre la clase social del muerto y el lugar donde se enterraba; en este sentido, si el muerto se enterraba en Siloé su procedencia familiar era pobre y clase baja, pero si el entierro se hacía en el Cementerio Metropolitano del sur, la familia era rica y adinerada. A pesar del tiempo, hoy muchas personas creen esto todavía. Y a la par con estos cementerios aparecen las casas funerales.

Así, hacia los años setenta y principios de los ochentas, aparecen en el contexto de la ciudad las casas de funerales o funerarias que son empresas que prestan el servicio al fallecido y su familia y que se encargaban además de realizar el papeleo, también de recibir a los muertos, acomodarlos, ofrecerles el ataúd, realizar el velorio, la capilla ardiente y el entierro, por un valor considerable. Inicialmente, estas funerarias disponían de una sala durante toda la noche para hacer la velación del muerto, ofreciendo tinto y aromáticas. Esto significaba tener la presencia de muchas personas toda la noche entrando y saliendo, consumiendo agua y energía. Más recientemente, justamente por los altos costos en servicios públicos y servicios a los clientes, las funerarias bajo el discurso del problema de seguridad, decidieron solo velar al muerto y permitir acompañantes hasta media noche. Las funerarias pueden velar en una solo rato hasta 10 muertos en el mismo momento durante cada noche. El promedio de costo de todo ello puede estar entre los $3.5 a $4 millones de pesos. No contentos con estos cambios, sustentados en la lógica del ahorro, ahora las funerarias sólo permiten que la familia y allegados acompañen el difunto sólo hasta las diez de la noche. En el acto de hacer el entierro, la familia puede incurrir en otros gastos como por ejemplo, el pago que se debe hacer al sacerdote por realizar la misa en la capilla ardiente, los arreglos florales, pagar a la corista o el mariachi que canta en el momento de bajar al ataúd al foso y otros imprevistos. Estos gastos no incluyen tampoco el pago que debe hacer la familia por servicio de buses y automóviles para transportar a los vecinos entre sus casas y el cementerio y luego entre el cementerio y sus casas.

Por comodidad ante la situación de dolor y tristeza, la mayoría de las familias, actualmente, utilizan estos servicios por las ventajas que pueden ofrecer en términos de toda la tramitología. Pero es un servicio costoso. La muerte se incluye como acto del cual muchos se lucran. Del tener el muerto en la casa hasta tenerlo en una sala de velación, es una muestra de lo mucho que se ha transformado esta sociedad, en buena medida por la dinámica del Mercado, que busca en toda actividad humana una forma de lucrarse, de la que incluso, ni una vez muertos escapamos.

huribe@uao.edu.co

Julio 15 de 2011.

martes, 12 de julio de 2011

LA DESPEDIDA, UNA REFLEXIÓN SOCIOLÓGICA

La despedida, una reflexión sociológica

Por
Hernando Uribe Castro
Magíster en Sociología.
Los seres humanos realizan una amplia gama de actividades a todo momento, sobre los que muy pocas veces se piensa, por lo menos, en el actual contexto de sociedad donde la velocidad, el vértigo, el peso de la situación económica que se vive en el diario vivir impide reflexionarlos. Uno de esos actos, es la despedida, que se ha venido transformado y resignificando según el contexto actual de sociedad. Pienso que en la vida diaria, cuántas veces nos saludamos, tantos veces nos despedimos.
La sociología y la antropología se han encargado de estudiar el saludo, los encuentros pero casi siempre se olvidan de la despedida como parte del cierre de un momento o acontecimiento.
En esta ocasión, abordaré la noción de despedida como un hecho social total que implica un conjunto de dimensiones entrelazadas. Así la despedida puede considerarse como una acción social multidimensional: es histórica, económica, simbólica y cultural. Depende de aspectos como la construcción de la nación, la clase social, el género, la étnia y la religión.
La despedida cotidiana puede expresarse en encuentros programados, efímeros y/o ocasionales; pero también la despedida como acto de cortesía: la despedida, o el acto de decir “adios” se construye socialmente.
La despedida depende entre otras cosas de sus orígenes y de sus motivaciones. La despedida que se produce entre amigos, conocidos, familiares, parejas, hasta la despedida laboral por pérdida del empleo, cambio de lugar de trabajo o jubilación. La despedida como paso de inicio a otra etapa o la despedida en la muerte. Ella se amolda según las circunstancias que la encuadran.
Los grandes flujos migratorios de latinos hacia distintos destinos en todo el mundo implicaron cantidad de despedidas. La migración entra en un proceso de incertidumbre donde la despedida se convierte en un acto central, a veces doloroso cuando las relaciones se han construido sobre bases sentimentales o de laxos familiares, pero también, a veces, de esperanza, en la idea de que las cosas pueden salir mejor. En ella un “adios” puede tener significado diferente a un “hasta luego” o un “hasta pronto”.
Las despedidas pueden ser silenciosas y calladas dadas con miradas, gestos, sonrisas, abrazos, caricias, hasta las despedidas violentas y físicas corporales. Los movimientos migratorios por ejemplo pueden obedecer a motivaciones personales, forzadas o externas a los individuos que pueden implicar por ejemplo, despedidas de corto, mediano y largo plazo en términos del tiempo y del espacio.
El acto de despedir o del despido se convirtió en salida para muchas multinacionales que veían en los despidos laborales una disminución de sus gastos de operación, conocido como el downsizing que se integra a la racionalidad económica de las empresas globales. En titular del Pais.com de España titulaba el 28 de junio de 2011 MySpace planea despedir al 37% de su plantilla. Solo quedan 400 trabajadores en esta red social. O el titilar del 28 de febrero de 2011 Panasonic despedirá 40.000 trabajadores en dos años. La empresa concluye la integración de equipos tras la compra de Sanyo en 2008.
La tecnificación, la búsqueda de empleo, los conflictos y las guerras, así como la falta de oportunidades en la sociedad contemporánea son motivados por el modelo de Sistema Mundo que impacta todos los territorios que se han integrado. La despedida de un ser querido porque viaja en la búsqueda de una nueva vida no es un caso aislado de los otros miles de individuos que en esa misma idea decide salir de su lugar de origen.
Un modelo de economía-mundo que se beneficia del movimiento permanente, continuo y masivo de millones de seres humanos entre un lugar y otro.
La despedida se convierte en un acto socialmente construido, a veces impuesto por la racionalidad económica, que hace que la despedida se convierta en una acción social que debe responder a las circunstancias que lo motiva y condicionan.
Casi en el contexto actual, muchos hemos vivenciado la despedida de personas cercanas, lo cual sin lugar a dudas genera rupturas en las relaciones cotidianas que tejemos los seres humanos, en el marco del sistema mundo capitalista.
Para no ir muy lejos, hace poco viví este proceso con una gran persona -a quien estimo y quiero muchísimo-, como resultado de su búsqueda de mejores oportunidades en otras latitudes, en este caso el destino fue España. Un país de donde salen también españoles a buscar mejores oportunidades en otros lugares del mundo.
Esa es la lógica del sistema.
Hernando Uribe Castro
Julio 12 de 2011

viernes, 1 de julio de 2011

LA CIUDAD QUE SE DESBORDA

LA CIUDAD QUE SE DESBORDA

Por

Hernando Uribe Castro, Magíster en Sociología.

El proceso de crecimiento de la ciudad obedece a múltiples determinantes, entre ellos, transición sociodemográfica, industrialización-urbanización, conflicto armado y social, violencia política, ideales de progreso, entre otros muchos.

Cali, es una ciudad que ha presenciado en su crecimiento un proceso de desborde del perímetro urbano. A veces debido a integración de áreas rurales como espacios urbanos a través de la ampliación de urbanizaciones, conjuntos cerrados y zonas residenciales que surgen por iniciativa de inversionistas privados o por programas del gobierno. Muchos de estos proyectos de inversiones privadas se construyen sobre zonas que representan algo riesgo como las laderas, pero que por ser de empresas reconocidas la situación pasa desapercibida. Pero otros procesos de desborde de la ciudad se están presentando por el surgimiento de manera continua de lo que se ha dado en llamar Asentamientos Humanos de Desarrollo Incompleto, en lenguaje coloquial conocidos como ocupaciones ilegales, invasiones, barrios piratas o asentamientos surbnormales.

Foto 1. Asentamiento sobre la zona de ladera en Cali.

Foto tomada por Hernando Uribe Castro, 2008.

En esta ciudad, según datos del mismo gobierno local, estos tipos de asentamientos ascienden a casi 70 sobre las zonas del perímetro urbano al oriente y al occidente. Dato éste que, por supuesto, no es exacto, en tanto, el número de estos asentamientos es mucho mayor. Un claro ejemplo son las numerosas ocupaciones existentes a lo largo del dique del río Cauca. De unas cuantas familias existentes durante los años ochentas, hoy se llegan a más de 36.000 mil personas, que representan algo más de 6.000 mil viviendas.

Ninguna de las diferentes administraciones municipales que han existido en la ciudad desde aquella época ha logrado resolver esta situación. Mi hipótesis es: las decisiones y las acciones que toman estos gobiernos en lugar de dar solución al fenómeno de ocupaciones ilegales de manera estructural, sus efectos llevan a todo lo contrario. Porque son decisiones de coyuntura y no de estructura. Por ejemplo, lugares que anteriormente habían sido desalojados vuelven a ser ocupados por otros pobladores.

La ciudad presenta un problema de Planeación Urbana en todas sus dimensiones. Problemas de decisión social y política. Vacios increíbles en Políticas Pública y protección de estos ciudadanos. Se necesitan mentes creativas que produzcan planes y proyectos en los que se promuevan decisiones inteligentes que beneficien la ciudad, las comunidades y a estos habitantes, cuyas acciones responden a las circunstancias que la economía-mundo capitalista promueve.

Los asentamientos ilegales son parte de las consecuencias de este sistema, que excluye, margina y reproduce la pobreza. Pronto publicaré un libro sobre este fenómeno.

Julio 1 de 2011.

huribe@uao.edu.co